La agricultura de regadío, es decir, aquella que se produce bajo técnicas de riego, se ha convertido en una importante fuente de producción en muchos lugares. A pesar de que muchos territorios están siempre bajo el riesgo de sequía, el rendimiento que se obtiene en las cosechas en regadío es mucho mayor que el que ofrecen los cultivos de secano.
El riego agrícola, por tanto, debe saber adaptarse a esta nueva realidad de escasez de agua en muchos territorios. A pesar de la tendencia al alza de los cultivos de regadío, el riego agrícola aporta menos a la producción total agrícola que el secano.
A nivel global, la agricultura de secano es practicada en el 83% de las tierras cultivadas y genera más del 60% de los alimentos del mundo. En regiones tropicales que presentan insuficiencia de agua, el secano supone más del 95% de las tierras cultivadas.
Ante esta realidad, la de la mayor producción en cultivos bajo riego agrícola pero como consecuencia un mayor coste ambiental, la clave radica en mejorar la eficiencia del riego para conseguir un mayor rendimiento de la producción y que esto no derive en encarecimiento de los alimentos ni en un impacto ambiental elevado.
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¿Qué técnicas de riego agrícola aumentan los rendimientos de las cosechas? El riego por inundación
Existen muchos tipos distintos de sistemas de riego agrícola, pero todos ellos se pueden enmarcar dentro de las cuatro categorías más conocidas: inundación, aspersión, goteo y microriego.
En el riego por inundación, las empresas proveedoras de sistemas de riego agrícola cuentan con equipos para distribuir el agua a través de dos vías: el surco de riego y la irrigación de frontera graduada.
En el surco de riego el agua se dirige hacia los surcos que se generan en el terreno a una pendiente gradual para una aplicación uniforme del riego. El agua de los surcos se suministra a través de una tubería sobre el suelo con una abertura llamada “puerta· en cada surco.
La apertura de cada puerta varía para ajustar el agua en cada flujo. Las tuberías se pueden abrir o cerrar para que pase el agua con electroválvulas de riego agrícola. Estos equipos los hay a nivel de grandes explotaciones o para terrenos a menor escala. En cualquier caso, las elecftroválvulas de riego son un elemento imprescindible para ganar eficacia en el riego. Para saber más sobre ellas, en este enlace podemos conocer algunos modelos.
La irrigación de frontera graduada es aquella en la que el regadío se dirige por una franja en el campo con bordes levantados a cada lado de la tierra a cultivar. El agua se suministra normalmente en la parte alta mediante una tubería de agua subterránea y un tubo ascendente con válvula.
El riego por aspersión
Esta tipología de riego agrícola es válida para regar campos de cualquier tamaño. Inclinación o forma. De manera muy básica, consiste en rociar agua mediante aspersores que hacen llegar al agua a toda la plantación.
Como en el caso anterior, existen diferentes formas de aspersores: tuberías de diferentes tamaños, sistemas de riego de movimiento mecánico o carretes de mangueras. En el último caso, los rociadores están instalados en un carro que va unido a la manguera en un gran carrete. A su vez, el carro está conectado a un tractor que se va desplazando por el campo de cultivo.
El riego por goteo, riego específico a cada plantación
Este sistema consiste en tuberías que aplican agua de manera directa a la zona de la raíz de la cosecha. Los emisores se instalan en las cercanías del árbol o la planta específica. Para evitar daños en la tubería, los sistemas por goteo pueden enterrarse en el terreno, la otra opción es colocarlos sobre el suelo, si bien con esta fórmula son más susceptibles de ser destruidos.
Al riego por goteo se le suma lo que se conoce como cinta de goteo, que no es más que un tubo muy delgado que se entrega en forma de bobina o rollo y que tiene emisores de gotas instalados. Los emisores están espaciados a una distancia de entre15 y 30 centímetros. Normalmente, la cinta por goteo se utiliza para cosechas de hortalizas, para el algodón y el maíz y en jardines.
El microriego o micro aspersión
El microriego obliga al uso de rociadores de pequeño volumen, los micro aspersores. Se utilizan en huertos y viñedos y, normalmente, se instalan en la base de las plantas o árboles para regar exclusivamente esa planta.
En contadas excepciones se instalan micro rociadores entre dos árboles. El agua necesaria para regar estas cosechas se obtiene desde micro aspersores que llegan desde arriba o desde tuberías enterradas bajo tierra.
La instalación de uno u otros sistemas de riego va a depender del cultivo, las dimensiones del mismo, la necesidad de agua y cuestiones relacionadas con la eficiencia agrícola y la cantidad de agua disponible, para hacer un uso sostenible de los recursos.