El presidente de Sri Lanka, Maithripala Sirisena, anunció el domingo la prohibición de los velos islámicos que cubren la cara en nombre de la “seguridad nacional”, una semana después de los sangrientos ataques islamistas en la Pascua.
“Esta prohibición está dirigida a garantizar la seguridad nacional”. “Nadie debería ocultar su rostro para complicar su identificación”, dijo en un comunicado la Presidencia. Esta medida, tomada por el Jefe de Estado, que utiliza poderes excepcionales, entrará en vigor a partir del lunes.
Esta medida se presenta el día después de una llamada de clérigos musulmanes locales a mujeres musulmanas, diciéndoles que no se cubran la cara por temor a reacciones hostiles después de los ataques de Daesh, en los que murieron 253 personas.
Los musulmanes en este país de 21 millones de habitantes, en su mayoría budistas, representan alrededor del 10% de la población. Sólo un pequeño número de mujeres usan el niqab.