La Cámara de Representantes de los Estados Unidos aprobó el ‘impeachment’ por los cargos de “abuso de poder” y “obstruir el trabajo del Congreso” contra el 45º presidente estadounidense, allanando el camino para un juicio por destitución ante el Senado, probablemente en enero.
Después de largas horas de debate a menudo acalorado, la Cámara de Representantes comenzó a votar en la noche del miércoles sobre la destitución de Donald Trump. Poco antes de las 8:30 p.m. (hora de Washington DC), los parlamentarios demócratas habían obtenido el número necesario de votos. Según el recuento final, por 230 votos contra 197, aprobaron al jefe de “abuso de poder” contra el multimillonario republicano, quien se convirtió en el tercer presidente en la historia de Estados Unidos enviado a juicio político ante el Senado. Poco después, la Cámara de Representantes adoptó un segundo cargo contra Trump: “obstruir el trabajo del Congreso” (229 votos a favor y 198 en contra), debido a su negativa a participar en la investigación de destitución dirigida a él.
Con raras excepciones, los votos siguieron líneas divisorias estrictamente partidistas. Solo ha surgido un punto de acuerdo entre los dos campos: este día “triste” entrará en los libros de historia. Porque esta votación, que tiene lugar menos de un año antes de las elecciones presidenciales , es histórica en todos los aspectos. Sólo otros dos presidentes, Andrew Johnson en 1868 y Bill Clinton en 1998, han sido acusados. El republicano Richard Nixon, involucrado en el escándalo de Watergate, había preferido renunciar en 1974 antes de sufrir tal botín.
“No solo odian a Donald Trump, odian a los 63 millones de estadounidenses que votaron por este presidente”, dijo el republicano Steve Scalise. “Es trágico, pero las acciones irresponsables del presidente hacen que su juicio político sea necesario”, dijo Nancy Pelosi, líder de los demócratas en el Congreso. “No nos dejó otra opción” , agregó.
Para los demócratas, el ex empresario traicionó el juramento del cargo. “Estaba listo para sacrificar nuestra seguridad nacional (…) para mejorar sus posibilidades de reelección”, acusó Adam Schiff, quien supervisó la investigación contra el multimillonario republicano. “Intentó hacer trampa y fue atrapado” , agregó, asegurando que “el peligro persistió” . Los demócratas culpan a Trump por usar su mandato para presionar al presidente ucraniano Volodymyr Zelensky para obligarlo a investigar a su potencial rival en las próximas elecciones presidenciales en 2020, Joe Biden.
La decisión de la Cámara de Representantes cayó al mismo tiempo que Donald Trump estaba en el podio de una reunión de campaña en Battle Creek, Michigan, a unos 1.000 kilómetros de Washington. Acusando a la “izquierda radical” de estar plagada de “envidia y odio” , acusó a los demócratas de tratar de “cancelar el voto de decenas de millones de estadounidenses” al tratar de sacarlo de la Casa Blanca. Y sintió que sus opositores políticos acababan de cometer un “suicidio político”.
El Presidente está “listo para los próximos pasos y confía en que estará completamente exento” durante el juicio al Senado, dijo la Casa Blanca el miércoles por la noche. Debido a que ahora depende de los senadores juzgar a Donald Trump, probablemente en enero, y decidir si será removido (“removido”) a la luz de los cargos en su contra. Un resultado que no tiene posibilidad de suceder. Los republicanos, que controlan la Cámara Alta, ya han advertido que tienen la intención de absolver a su presidente.El miércoles por la noche, justo después de la histórica votación de la Cámara sobre el juicio político de Donald Trump, la líder demócrata Nancy Pelosi pidió un “juicio justo” en el Senado. Esta excelente estratega ha insinuado que podría retrasar la transmisión del archivo de cargos, siempre y cuando no haya obtenido un mínimo de garantías. El enfrentamiento ha comenzado.