Cuando llega la Navidad, ya sabemos lo que estas fechas suponen: comidas y cenas con la familia y de empresa, la Nochevieja, y otros compromisos que son típicos de estas fechas. Y es que las fiestas también son momentos para reunirse con aquellos amigos a los que hace un tiempo que no se ve, o con los que forman parte de nuestro día a día. Estos son solo algunos de los eventos que se nos ponen por delante en diciembre.
Y con todo ello, la eterna pregunta: ¿qué me pongo? Dicen que hay apuestas seguras en Navidad y por supuesto que es cierto, pero habría que matizar esta afirmación recordando que lo que le sienta bien a una persona, no tiene por qué irle bien a otra. Al final, por muchas fiestas navideñas que vengan, la personalidad propia de cada cual se impone a la hora de decidir look.
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Si estás cómoda en tu zona de confort, ¡no te salgas de ella!
De hecho, hay personas que se sienten literalmente disfrazadas cuando se las saca de su “hábitat natural” en lo que a la forma de vestir se refiere. Ahora está muy de moda aquello de salir de la zona de confort, pero no siempre está garantizado que lo que haya al otro lado de ese lugar vaya a ser más confortable aún. Muchas personas piensan así, y no están dispuestas a renunciar a su estilo. Y si lo tienen claro hacen muy bien, ya que no está reñido seguir siendo una misma con adaptar el look a la ocasión que toque. En este caso, la Navidad.
Teniendo presente esto, hemos querido recopilar lo que dicen los expertos al respecto de cómo compatibilizar el outfit navideño con la personalidad de cada una. Pues bien, en primer lugar se aconseja saber definir bien el estilo que define a esa persona en función de su personalidad.
Los tres looks por excelencia
Lo principal es saber si somos más elegantes, clásicas o casual. Por supuesto el físico también tiene mucho que decir, siendo importante tener presente el color de ojos, de pelo y de piel. En función de estos aspectos, se proponen tres looks.
Para las más atrevidas, la mejor opción puede pasar por un vestido plateado, que configurará un estilismo de lo más chic que hará girar todas las miradas. Sería ideal complementarlo con un maquillaje de ojos en tonos metalizados también, pintando los labios de forma más discreta.
¿Eres más casual? En ese caso será mejor que te decantes por un vestido negro con clase, y un toque de sensualidad. De este modo puedes desligarte de esos trajes más sobrios que te pones a diario para ir al trabajo, pero no perderás tu estilo por el camino.
Finalmente, las más clásicas pueden optar por combinar el negro con el rojo en su look. Por ejemplo, el rojo pueden llevarlo en un top arreglado para las fiestas, y el negro en un pantalón de corte clásico. Si hay que salir, nada mejor que culminar este estilismo con un abrigo negro, ya que el éxito estará garantizado.