La llegada de las criptomonedas marcó un punto de cambio inevitable en Internet tal y como se conoce. La tecnología blockchain es la responsable de ofrecer más confiabilidad en privacidad y eficiencia que no sólo favorece el criptomercado, sino a todo Internet.
Hemos presenciado el nacimiento de la World Wide Web, que en su época consistió en algunos directorios de archivos y salas de chat, luego vimos la versión 2.0 con la llegada de los servicios de streaming, servicios de mensajería instantánea y tiendas online.
Estamos a punto de ver el nacimiento de la Web 3.0, un proyecto que promete renovar Internet con la descentralización, privacidad y seguridad.
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Dominios aplicados a criptomonedas
La idea es que las aplicaciones y páginas web estén construidas dentro del blockchain, lo que se traduce en una descentralización, pues ya no dependerán de entidades únicas centrales ni serán víctimas del control gubernamental o espionaje.
En este sentido, los desarrolladores de la criptomoneda Ethereum están tomando la vanguardia en la creación de dominios ETH con su servicio Ethereum Name Service (ENS).
¿En qué consiste? En la reinvención de los monederos digitales comenzando por su nombre y dominio al acceso público, sustituirá los largos números que identifican un monedero y en lugar de un “oXTg67bntu87Vjh8h8vmjf798bgxxjgh6434” se mostrará un simple y hasta estético “carlosramos.eth”, por ejemplo.
Pero significa ventajas que van más allá del cambio de nombre, conlleva también optimizaciones en la cadena de seguridad de encriptación, mayor blindaje y más velocidad en las transacciones que se hagan.
Ethereum empezó a subastar desde el año 2017 estos dominios, a lo que otras criptomonedas ya están en el desarrollo de sus propios dominios.
La idea de contar con una moneda sólida, confiable, ajena a cualquier tipo de control de Estado y sobre todo protegida contra cualquier intento de hackeo o robo, cautiva a cada vez más personas alrededor del mundo, es por esto que sitios como comprarbitcoins.org se hacen cada vez más necesarios, no sólo por ofrecer tutoriales para entender este mercado y saber invertir, también recomiendan casas de cambio donde comprar bitcoins y etherum.
¿Cómo será la web descentralizada?
Internet ha ido desarrollándose sobre la marcha a medida que surgen cada vez más innovaciones, tecnología y se abre más el multiculturalismo global. Es por eso que la actualización y la optimización era algo inevitable.
Las siguientes son sólo algunas de las características y ventajas que tendrá Internet 3.0:
- Más privacidad: como era de esperar, la privacidad sería el tema prioritario para mejorar, como consecuencia de las revelaciones de obtención ilegal de información privada de los usuarios por parte de grandes monopolios como Google y Facebook.
- Enfocada en el usuario: para no ser objeto de control por alguna entidad centralizada, la red trabajará con tecnología P2P para redireccionar y blindar la información personal y el acceso contra sensores externos.
- Datos personales con los usuarios: la propiedad de los datos es sin duda otra de las grandes problemáticas de la actualidad. Grandes compañías como Amazon y Google tienen posesión de toda la información y muchas veces sin el consentimiento del usuario la extraen para fines publicitarios. Internet 3.0 garantizará que toda la información de identidad, gustos, opiniones y demás información sensible esté en manos de las personas y no al revés.
- Aplicaciones con interoperabilidad: con una red descentralizada será posible una nueva realidad donde se pueda acceder a las aplicaciones desde cualquier dispositivo sin depender de un sistema operativo o versión específica.
- Mejor semántica de la web: se busca que los dispositivos lean e interpreten el contenido web como si se tratase de comportamiento humano. Esto se relaciona directamente con el desarrollo de Inteligencia Artificial, lo que permitirá que los ordenadores y sistemas sean más ágiles y dinámicos.
El blockchain o cadena de bloques es la tecnología matriz que permite el desarrollo continuo de cada vez más mejoras que simplifican y optimizan la experiencia de conectarse a Internet. Es un recurso clave para garantizar una neutralidad, para evitar que los monopolios comerciales, junto con los gobiernos, censuren o privilegien ciertos contenidos sobre otros.
La nueva versión 3.0 se propone contar con aplicaciones que desde un principio sean descentralizadas, para evitar problemas de compatibilidad o retrasos en las transacciones y riesgos de fallos de seguridad que pudieran significar robos masivos de datos y violación de privacidad, como ya ha ocurrido.
Los sistemas de distribución serán mucho menos propensos a interrupciones, bloqueos o censuras, un problema que hoy en día es común en países con gobiernos totalitarios que atentan contra la libertad de expresión.
Para el usuario común, quizás no sean tan evidentes las nuevas mejoras que traerá esta tecnología a nuestras vidas cotidianas, ya que son mejoras de fondo y no tanto de forma y no supondrán un cambio estético tan llamativo, pero sin duda convertirán el ciberespacio en un entorno más seguro de navegar y explorar.