Existen muchos factores que influyen en el momento de iniciar un emprendimiento. Estos pueden ser de diferente tenor, como la preparación, capital a invertir o incluso la suerte. Lo cierto es que emprender también implica tomar riesgos y, en algunos casos, decidir de manera acertada.
La buena noticia es que es posible sacar el máximo provecho de casi cualquier situación, sin perder de vista los objetivos profesionales, con solamente seguir los consejos que se presentan a continuación.
Contenido
Hay que tener un plan de negocios
En primer lugar, resulta deseable tener conocimientos claros acerca de dos cosas, qué servicios ofrecer y cómo obtener los recursos necesarios. Esto incluye también hacer un presupuesto realista.
La razón principal es que de esta manera es mucho más fácil para el emprendedor saber si cuenta con los fondos requeridos. De otra forma deberá recurrir a créditos rápidos para conseguir financiación, similar a los que otorgan ciertas websites, como https://www.credy.es/.
La principal característica de un buen plan de negocios es que permite medir de manera clara y objetiva el margen de crecimiento, los riesgos a los cuales se enfrenta el posible emprendedor y lo más importante, podrá saber si efectivamente se trata de una idea rentable que dará frutos más adelante.
Es fundamental tener claro cuál es el producto a comercializar, conocer sus ventajas y en el caso de incluir estrategias como el personal branding, tener claro qué es lo que lo diferencia del resto.
Estudiar a la competencia
Este es un punto crucial en la formación de casi cualquier empresa, ya que un buen competidor representa un valor referencial. Todo proyecto que lleva más tiempo en el mercado, ofrece información realmente valiosa acerca de cómo se trabaja, cuál es el esquema de negocio que ha dado mejores resultados e incluso permite vislumbrar a qué retos se enfrentará el futuro emprendedor.
El estudio de otros modelos de negocios similares permite poner en perspectiva el propio desarrollo, especialmente cuando se trata de ciertos sectores, como la gastronomía o telecomunicaciones. También puede ser de ayuda para prepararse ante posibles reveses financieros o incluso medir cuánto tiempo le tomará recuperarse económicamente.
En cualquier caso, es necesario recordar que puede ser perjudicial desestimar a la competencia. Antes bien, esta ofrece información valiosa a la hora de plantear una estrategia que proporcione resultados.
Mantener la tesorería al día
Esta es una de las cuentas más importantes y la que siempre debe estar al día. Una buena manera de lograrlo es hacer cálculos de más del 15% para gastos de emergencia, tener un fondo de reserva y mantener al día cualquier aporte fiscal.
Aparte, es bueno hacer cálculos de todo lo que necesite la startup, según sea su ramo. Por ejemplo, si se trata de un emprendimiento de informática es necesario tener claro el coste de actualizaciones de software, el importe mensual del local, en caso de que sea necesario y otros gastos relacionados.
Por último, es recomendable ajustar los precios de los servicios ofrecidos, teniendo en cuenta estas previsiones. Esto se debe a que son gastos fijos a los cuales se destina siempre un pequeño margen de las ganancias.
Tener claro cómo expandirse
Todo emprendedor debe pensar en el crecimiento de su negocio. Esto significa tener en cuenta ciertos puntos, como por ejemplo, saber cuándo hacer nuevas inversiones, o en qué momento es necesario contratar a alguien. Por supuesto, esto implica una inversión adicional, solo que está relacionada con el crecimiento de la startup, sobre todo en su primer año.
Según el tipo de emprendimiento la expansión puede variar. Por ejemplo, si se trata de un servicio de redacción de contenidos, podrá medirse en número de clientes satisfechos, conversiones, likes y expansión a través de las redes sociales. Por el contrario, si se trata de un delivery de alimentos y bebidas, este se traducirá en una ampliación del área de servicio o cualquier mejora de esta índole.
Es importante dejar claro que no existe una fórmula definida para lograr que un emprendimiento crezca, sino que el desarrollo está sujeto a varios puntos, como la gestión de los fondos, manejo de los recursos y tipo de producto que se ofrece.
Desarrollar una buena estrategia de marketing
Una buena estrategia de marketing digital es realmente importante. Esto se debe a que el auge de Internet y las nuevas tecnologías, produjo también un cambio en la manera de comunicar. Ya no se trata de vender por vender. Los nuevos usuarios también buscan experiencias innovadoras que los cautiven y los hagan sentir especiales.
Usar la estrategia digital adecuada le permitirá al futuro emprendedor vender mejor su producto. Sin embargo, es importante aclarar que para llegar a este paso antes es necesario conocer realmente bien sus características, los beneficios que realmente ofrece e incluso, sus puntos más débiles. ¿La razón? Es simple. De esta forma es más fácil saber qué cualidades vale la pena explotar comunicacionalmente.