Esta es una revelación del New York Times, no confirmada por la Casa Blanca. El jueves, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, habría autorizado un ataque contra Irán, un país con el que la tensión está en su apogeo, antes de cancelarla en el último momento.
Objetivos específicos de la estrategia iraní: radar y baterías de misiles, entre otros. Después de la costa este todos los días, cuando el presidente estadounidense se retractó, no solo todo estaba en su lugar, sino que la operación había comenzado. No está claro si Donald Trump ha decidido revertir su decisión por razones logísticas o por razones más estratégicas.
Este evento se produce cuando el jueves Irán dijo que tenía pruebas irrefutables de que un avión no tripulado estadounidense había violado su espacio aéreo y que había sido recuperado en sus aguas territoriales. Washington niega esta versión y, en cambio, afirma que el drone fue derribado por fuerzas iraníes fuera de las aguas territoriales del país.
Los líderes del Congreso de los Estados Unidos (la Cámara de Representantes, en poder de los demócratas, y el Senado, por los republicanos), fueron advertidos de este ataque poco antes de la cancelación.