Mantener un alto volumen de licitaciones es clave para poder invertir en diversas infraestructuras como carreteras, colegios u hospitales.
Sin duda alguna, la pandemia del COVID-19 ha tenido un enorme impacto en la economía de todos los países del mundo, de manera que muchas administraciones gubernamentales se han visto obligadas a reducir el número de licitaciones. Es decir, no han publicado tantas ofertas públicas como hubieran deseado. A pesar de ello, los datos de España no son negativos, puesto que se han seguido realizando licitaciones.
Según los datos publicados por SEOPAN -Asociación de Empresas Constructoras y Concesionarias de Infraestructuras-, en 2020, el volumen de licitaciones en España alcanzó los 11.732.620€. Una cifra bastante alta que se repartió entre distintos tipos de obras, ya que por un lado, a obra civil se destinaron 7.097.304€, mientras que por otro lado, en edificación se gastaron 4.635.316€.
A su vez, dentro de estas obras se pueden identificar varias partidas, puesto que en el caso de la obra civil se realizaron licitaciones en transportes -3.204.951€-, hidráulicas -1.783.886€-, urbanización -1.759.028€- y medioambiente -349.439€-. Por su parte, en el caso de la edificación, las licitaciones se distribuyeron entre edificación no residencial -4.094.056€- y vivienda residencial -541.260€-
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Importancia de las licitaciones para invertir en infraestructuras
Aunque a priori puede parecer un gran gasto público, la realidad es que mantener un alto volumen de licitaciones es fundamental a la hora de invertir en infraestructuras que necesitan los ciudadanos como colegios, hospitales o carreteras. Y es que gracias a estas licitaciones, todas las personas pueden beneficiarse de una amplia gama de servicios públicos que se utilizan en el día a día.
Estas licitaciones son procesos reglados, mediante los cuales una determinada organización gubernamental da a conocer una necesidad relacionada con las infraestructuras, de modo que solicitan ofertas de empresas especializadas en la materia. Por tanto, estos negocios deben presentar una serie de documentos técnicos para poder acceder a las licitaciones de obras y servicios.
Para que las licitaciones lleguen a buen puerto, lo más adecuado es contar con una empresa experta en la elaboración de memorias técnicas para licitaciones. Un claro ejemplo, lo encontramos en JyRingenieros, una ingeniería de Zaragoza que lleva más de 15 años realizando las labores de elaboración de documentación técnica para licitaciones de obra y servicios, obteniendo grandes resultados para sus clientes.
¿Cómo elaborar la documentación técnica para licitaciones?
Los negocios que quieren presentar una memoria técnica para licitaciones deben tener mucho cuidado, puesto que tienen que ajustarse a los requerimientos concretos que se detallan en el pliego. Por ello, lo más recomendable es ponerse en contacto con una empresa de ingeniería como JyRingenieros, la cual se dedica a elaborar memorias técnicas para licitaciones de obra y servicios.
En esta consultoría de ingeniería trabajan técnicos con dilatada experiencia en el mundo de las licitaciones, de manera que saben cómo elaborar memorias técnicas, estudios económicos y sobres administrativos, tanto de obra civil como de edificación. Además, debido a la crisis inmobiliaria y a la actual crisis sanitaria provocada por el COVID-19, JyRingenieros ha tenido que diversificar su actividad.
Por ello, esta empresa ha centrado sus esfuerzos en formarse en posicionamiento en buscadores, para conocer el algoritmo de Google y ayudar a las empresas a posicionar sus páginas webs. Como consultor SEO en Zaragoza ha ganado una gran reputación, gracias a las decenas de clientes satisfechos que tienen mayor visibilidad en los buscadores. Además, también ofrece servicios de elaboración de sitios webs, mantenimiento web y realización de certificados energéticos en Zaragoza.
¿Por qué las empresas deben externalizar algunos servicios?
Como ya se ha comentado anteriormente, las empresas que necesitan elaborar una memoria técnica para licitaciones de obra y servicios, deben contar con la ayuda de auténticos profesionales especializados en la materia. Algo que también ocurre con otras acciones o tareas concretas, las cuales pueden suponer una importante pérdida de tiempo para los negocios.
Para no tener problemas en este sentido, las empresas contratistas tienen que apostar por la externalización de servicios, puesto que así pueden dedicarse exclusivamente al negocio “core”. Y es que al externalizar trabajos no productivos, las empresas constructoras pueden enfocarse en tareas importantes, lo que se traduce en una mayor eficiencia y un menor coste en el desarrollo de la actividad profesional.
Se puede decir por tanto, que las empresas constructoras necesitan a especialistas externos para llevar a cabo las tareas no esenciales, ya que es la única manera de optimizar los recursos, y por ende, de aumentar la cuenta de resultados. Por ello, la acción de externalizar servicios se ha convertido en algo imprescindible, sobre todo, para aquellos negocios contratistas que quieren seguir expandiéndose en el mercado.