En una era en la que el mundo digital y la tecnología ha consolidado su influencia en todos los ámbitos de la vida, resulta extraño pensar en aquellos juegos y juguetes que formaron parte de la infancia de nuestros abuelos. Juegos clásicos en los que, más allá del propio objeto, la imaginación jugaba un papel fundamental para fomentar un desarrollo, físico y emocional, más equilibrado.
Aquellos juguetes, realizados con materiales naturales, fabricados por artesanos y ajustados a las necesidades particulares de los más pequeños, no han perdido su capacidad de sorprender y emocionar, como este calidoscopio, un juguete con encanto que sigue transformando el paisaje imaginativo de los niños en pleno siglo XXI. Si estás buscando deslumbrar a los más pequeños con los mejores juguetes clásicos, a continuación te ofrecemos una pequeña muestra.
Contenido
Juguetes que sorprenderán a los niños del siglo XXI
1. Calidoscopio
A pesar de su sencillez, tanto de aspecto como de manejo, el calidoscopio es uno de los más admirados por los niños. Se trata de un juguete óptico que, al girarlo, va creando nuevos paisajes y extrañas figuras llenas de singularidad y belleza. En un principio fue creado con fines científicos dentro del campo de la óptica, pero pronto se convirtió en una herramienta que ofrece una experiencia visual fascinante.
2. Torres apilables
Se trata de un juguete multifuncional en el que se anima a los más pequeños a apilar objetos a través de una estructura fija. Esta actividad ofrece infinitos beneficios como el desarrollo de las habilidades motoras finas, el razonamiento espacial y la coordinación mano-ojo. Al mismo tiempo que aprenden a diferenciar entre tamaños, colores y formas.
3. Puzzles
Es otro de los grandes clásicos. Dependiendo de la edad así será el número de piezas. Los puzzles ofrecen importantes beneficios como ejercitar la memoria visual, reconocer las formas y colores, ayudándoles también a la concentración y la tenacidad.
4. Dominó
Más allá de tratarse de un juego asociado al mundo de los adultos, los dominós infantiles ofrecen significativas ventajas para los más pequeños. Es especialmente valioso para que los niños resuelvan problemas a través de la imaginación y la creatividad. Además, favorece las relaciones sociales, así como la interacción verbal.
5. Burbujas
Conseguir crear bonitas pompas de jabón y burbujas es una de las actividades más divertidas para los niños. Pero, además, se consiguen beneficios importantes para su desarrollo. Uno de los más relevantes es la capacidad de desarrollar los músculos pequeños que conforman la cavidad bucal de los niños. A través del soplido para generar las burbujas, los labios se fruncen, fortaleciendo los músculos que lo componen y que ayudarán para formar palabras al hablar o tragar sin peligro al comer.
6. Parchís
Otro de los grandes juegos clásicos y que, como tal, ofrece infinitos beneficios a los más pequeños. Además de poder interactuar con los adultos, el parchís fomenta el desarrollo cognitivo, la concentración, la agilidad mental, la resolución de problemas, la constancia y el juego en equipo.
7. Marionetas
Las marionetas son ideales para que los niños hagan crecer su imaginación a través de un contexto narrativo determinado. Además de desarrollar su creatividad, también les ayuda a aumentar el vocabulario, la memoria y mejorar la coordinación motora. Sin olvidar que suelen ser una herramienta muy eficaz para vencer la timidez y expresar las emociones con naturalidad.
Los juguetes clásicos o tradicionales no han dejado de estar presentes a pesar del imperativo de la tecnología. Gracias a sus importantes beneficios durante el desarrollo infantil, son la mejor herramienta para que los más pequeños puedan divertirse al mismo tiempo que fomentan sus habilidades, tanto físicas como mentales y emocionales.