Los beneficios de la energía solar son numerosos. Con todo, algunos de ellos son desconocidos para la gran mayoría de la gente. Por este motivo, a continuación, elaboramos un ranking de los 7 beneficios de la energía fotovoltaica menos difundidos.
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Sin coste
La energía solar fotovoltaica no es barata, sino gratuita. Mucha gente no lo sabe, piensa que su coste es reducido, pero ignora que en realidad es inexistente. Al no contar con gastos ni de mantenimiento ni de producción, la generación de este tipo de energía no supondrá ningún gasto adicional para nuestro bolsillo. La única inversión que habrá que realizar será para la instalación de las placas fotovoltaicas. Una vez instaladas, el dinero invertido comienza a amortizarse rápidamente, sin costes adicionales. De esta manera, aunque pueda parecer una inversión costosa, en realidad la energía solar constituye una forma de producir electricidad muy económica.
Menos pérdidas en la distribución
Cuando se transporta energía, siempre se pierden pequeñas cantidades en los desplazamientos que se realizan desde el lugar en el que se produce hasta el lugar en el que se subministra. Aunque por lo general las pérdidas no suelen ser muy voluminosas, en aquellas zonas que están densamente pobladas sí que suelen afectar al rendimiento de las instalaciones. No obstante, con la instalación de placas fotovoltaicas en el hogar este problema desaparece de raíz, mejorando la eficiencia de nuestro sistema eléctrico. Así, no solo ganaremos nosotros, sino las propias instalaciones eléctricas.
Acceso a la electricidad en zonas remotas
La energía solar fotovoltaica puede ser una alternativa perfecta para aquellas zonas remotas, con escasas conexiones con los núcleos urbanos. Normalmente, las redes de distribución de la electricidad no alcanzan todas las áreas geográficas, puesto que el coste de hacerlo es demasiado elevado en algunos casos. De este modo, gracias a la energía solar, cualquier zona puede tener conexión eléctrica. Para algunos lugares del planeta, esto supone sin duda un gran avance. Aunque estamos acostumbrados a verlo en nuestras ciudades y pueblos, la energía solar constituye una gran oportunidad para países con instalaciones eléctricas más precarias.
Una gran versatilidad de las instalaciones
La versatilidad es, desde luego, una de las principales características de este tipo de instalaciones. Fáciles y sencillas de montar, estas se pueden ubicar tanto en superficies horizontales como verticales. Además, las instalaciones se pueden ampliar sin ningún inconveniente, por lo que siempre es posible empezar instalando un número reducido de placas para, posteriormente, aumentar la instalación. En muchos casos, la gente prefiere empezar poco a poco, para probar su eficacia y, una vez comprobada, incrementar su apuesta por las energías renovables. Siempre sucede que aquello que no conocemos del todo puede generar dudas comprensibles, pero en el caso de la energía solar su eficacia está completamente garantizada.
Coincidencia en los picos de demanda y producción
Los momentos en los que se produce un aumento de la demanda de energía son aquellos en los que está se produce a un precio más elevado, generalmente entre las 11 de la mañana y las 4 de la tarde. No obstante, estas son las horas en los que la luz solar es más intensa, por lo que también tiene lugar un pico en la producción de la electricidad. Debido a esta coincidencia, los precios de la electricidad solar bajan considerablemente, igualándose a los de aquellos momentos de menos consumo eléctrico, entre las 8 y las 11 de la noche. De esta forma, apostando por la energía solar ahorrarás considerablemente, notando una gran diferencia en el coste de la electricidad.
Amigable con el medio ambiente
La energía solar no produce ningún tipo de contaminación, ni siquiera acústica. Las placas fotovoltaicas son tan silenciosas, que resultan perfectas para instalarlas en cualquier entorno, también en aquellos urbanos. Además, la energía solar no genera residuos y la vida útil de las placas es mucho superior a la de cualquier otro sistema de generación de electricidad. De hecho, las placas están diseñadas para soportar climas variables y extremos, por lo que pueden ser instaladas en cualquier localización. Las placas soportan tanto el calor de agosto como el frío de las zonas más gélidas. Además, en caso de tormenta, su instalación en el hogar no implica ningún peligro.
Di adiós a los apagones
Con la instalación de placas fotovoltaicas puedes despedirte de los apagones para siempre. Al instalar placas de autoconsumo en el hogar, las subidas de tensión de la red eléctrica no se vuelven a producir nunca más. Asimismo, como existen muchos centros de producción deslocalizados, esto provoca que la red sea muy segura, evitando las sobrecargas o los incendios. De este modo, podrás olvidarte de comprar velar o focos, porque no volverás a estar sin luz en tu hogar. Si quieres apostar por la energía solar e instalar en tu hogar placas fotovoltaicas, Solarfam es la mejor de las alternativas, puesto que son los mejores expertos en la materia.