Espana campeona del mundo de baloncesto

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El rol del baloncesto en la cultura y sociedad españolas en 2023

El deporte es una de las partes más importantes de la cultura de un país. En España, los deportes ocupan un lugar central, no solo desde el punto de vista del espectador, sino también desde el de aquellos que lo practican de manera social.

En este sentido, el baloncesto es una de las disciplinas más populares, hasta el punto de que se encuentra solo por debajo del fútbol. Por lo tanto, tiene una injerencia trascendental en las personas. 

Veamos más en profundidad de qué se trata.

El lado social del baloncesto

El baloncesto, como hemos mencionado, es uno de los deportes más populares en España. Se calcula que más de 800 000 personas practican esta disciplina. Este número incluye diferentes sectores y categorías.

Por ejemplo, están aquellos jóvenes que desean convertirse en jugadores profesionales y acuden a los principales clubes del país con la esperanza de lograrlo. Luego, están los jugadores no profesionales, que compiten en torneos no oficiales, organizados en comunidad o en clubes de barrio. También están los jugadores casuales, que se juntan entre amigos a divertirse, hasta incluso en un lugar abierto como una plaza.

El deporte enseña muchos valores y es muy importante en la sociedad. El baloncesto, al ser un deporte grupal, enseña a trabajar en equipo, a apreciar el valor del esfuerzo en conjunto y la competitividad entre rivales. Además, practicar deporte es saludable, lo que mejora la calidad de vida de las personas.

El aspecto cultural del baloncesto

Por su parte, desde el punto de vista cultural, el baloncesto también tiene una presencia muy importante en España.

La liga profesional, conocida como Liga ACB, es de alta competencia a nivel mundial. Muchos expertos la consideran como la segunda competición más importante, solo por detrás de la NBA, la liga profesional de Estados Unidos.

En esta competición hay equipos de importancia, como el Real Madrid, el Barcelona, el Baskonia, el Badalona, el Málaga y más. Además de la liga local, los mejores clasificados juegan otro torneo, llamado Copa del Rey.

Esto no es todo, sino que también se incluyen los torneos internacionales, como la EuroLeague. De esta forma, los seguidores de cada club tienen una gran cantidad de partidos para emocionarse y animar a su equipo.

La competitividad de la Liga ACB ha hecho que grandes talentos pasen por España. En muchos casos, sirvió como punto de partida para llegar a un nivel más alto, como la propia NBA. Por lo tanto, España es una oportunidad de oro para explotar el talento.

Estamos hablando de jugadores españoles como los hermanos Gasol, Ricky Rubio, o los hermanos Hernangómez. También de talentos internacionales, como los argentinos Luis Scola y Facundo Campazzo.

El único caso significativo es el de Luka Dončić. El esloveno estuvo tres años en el Real Madrid, donde disputó 216 partidos y ganó siete títulos. Además, se ganó el cariño de la afición. Por eso, cuando partió hacia la NBA, muchos españoles lo sintieron como propio y comenzaron a animar a su nuevo equipo, los Dallas Mavericks. Hoy, Dončić es una de las principales estrellas del baloncesto mundial.

Si hablamos de cultura, no se puede dejar de lado el fenómeno de las selecciones nacionales. Cuando un equipo representa a toda España, la gente deja de lado su fanatismo y alienta por igual por su país. En ese sentido, la selección española de baloncesto tiene un alto nivel y está en la élite de la disciplina.

En los últimos tiempos, el equipo español le ha dado muchas alegrías a la gente, que, de manera recíproca, empezó a interesarse aún más por el baloncesto. España se coronó campeón mundial en 2019, venciendo a Argentina en la final. Además, es el vigente campeón de Europa, cuando le ganó la final a Francia en 2022.

En este sentido, se encuentra en el máximo escalón posible en el baloncesto de selecciones. La única excepción son los Juegos Olímpicos, que han sido esquivos a lo largo de los años. Esto no quiere decir que haya tenido malas actuaciones, ya que obtuvo tres medallas de plata, la última en Londres 2012. Sin embargo, es una espina que aún duele y la medalla de oro es el gran anhelo de jugadores y fanáticos por igual.

En la actualidad, gracias a la tecnología, es aún más fácil acceder al baloncesto. Los partidos se pueden ver en distintas plataformas y la información está al alcance de la mano. Lo mismo ocurre con los jugadores: con las redes sociales, la gente se siente mucho más cercana a ellos y los puede seguir en todo momento.

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