“Tengo una avería del coche que pagar y me falta dinero, ¿y si pido un crédito por internet?” Puede que no lo sepas, pero ese primer paso puede ser el detonante de toda una catástrofe para tu economía. Los préstamos online han ganado mucha fama últimamente y están creciendo a un ritmo exponencial, sobre todo en el panorama actual que estamos viviendo, pero nunca han sido ni serán la mejor opción para resolver cualquier complicación económica.
Vamos a explicarlo con más detalle a continuación, aunque antes tenemos que aclarar que pueden existir soluciones en este ámbito que sean buenas. Por supuesto que pueden haber buenos créditos por internet, pero dar con ellos no es tan sencillo.
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¿Por qué es mejor buscar alternativas a los préstamos online?
Hay muchos motivos por los que probar con otras opciones diferentes a los préstamos en línea es mejor que recurrir a ellos a la hora de tener que pagar grandes sumas de dinero, o de afrontar gastos con los que no se contaba. Bien es cierto que los hay que dan el paso sin miedo y seguridad, informándose todo lo necesario previamente y apoyándose en herramientas comparadoras como 24prestamo.es o similares, muy útiles para comparar propuestas de financieras.
Pero no es el mejor camino, de hecho, vamos a ver a continuación por qué lo decimos. Vamos a explicar por qué es mejor buscar alternativas a los créditos por internet.
Porque son más deuda acumulada
Es cierto que un crédito por internet puede ser ideal para aplacar una deuda que se tenga que afrontar, o para esos gastos que son totalmente inesperados e imposibles de asumir; pero también es cierto que estos créditos son más dinero a deber, más dinero a pagar, aunque se haya dividido en diferentes plazos para dar algo más de flexibilidad.
En el fondo, pedir un préstamo en la red, al igual que uno tradicional, es adquirir otra deuda, normalmente de gran tamaño y que acompañará durante mucho tiempo. Ese es su principal hándicap, sobre todo por los intereses. A causa de estos, al final acabarás pagando bastante más de lo que pensabas, y también más de lo que has pedido para afrontar ese coste que acaba de llegar.
Más deuda que acumulas, más tiempo que tienes que pasar pagando, menos facilidades y flexibilidad que tienes en lo económico. Es así de sencillo, y a la larga puede resultar incluso bastante problemático. Por eso insistimos tanto en este aspecto.
Porque no son tan transparentes como parece
Otro punto bastante importante, y el principal motivo por el que hay que andarse con cien ojos a la hora de pedir cualquier tipo de crédito por internet. Las compañías financieras de internet no son tan transparentes como aparentan a simple vista, de hecho, tienes que ojear con cuidado, comparando con otras opciones y viendo todas y cada una de las características y condiciones de los préstamos que ofrecen.
Lo decimos porque se han dado muchos casos, y se seguirán dando, de clientes que descubren con horror la cantidad de cuotas que tienen que pagar, durante cuánto tiempo y, sobre todo, cuál es la cuantía total a abonar, una vez han firmado el contrato del crédito. Toda esa información debe buscarse y analizarse previamente para evitar sorpresas desagradables.
Algunas entidades son capaces de inflar el total a pagar con intereses hasta el punto de duplicar el valor del préstamo original. Algo totalmente contraproducente, y lo que hace que se genere cierta aversión, lógicamente, frente a estos productos financieros.
Porque la sombra de las estafas sigue en internet
Parece que, con el avance tecnológico y la masificación de internet, los problemas de estafas y timos online podrían haberse disminuido, pero la realidad es totalmente contraria a esto. De hecho, en los últimos meses se ha registrado un gran incremento en el número de estafas online. La complicada situación que se está viviendo ha llevado a muchas trampas, a más incautos y a más estafadores.
Desafortunadamente, esto es algo que se extiende a las compañías que ofrecen sus créditos a través de internet. Algunas llegan a pedir un adelanto de las cuotas antes incluso de ofrecer el préstamo, cosa que indica claramente que algo no va bien. Evitarlas es crucial para no llevarse luego serios problemas por más gastos a asumir y la imposibilidad de acceder al dinero solicitado.
De hecho, esta amenaza es una de las principales razones tanto para alejarse de los préstamos en línea como para andarse con mucho ojo en caso de dar el paso.
Todo esto es lo que obliga a insistir. Siempre es mejor recurrir a los ahorros que se puedan haber acumulado para hacer frente a cualquier posible deuda, en lugar de buscar un préstamo por internet para plantarle cara. Pueden ser una buena solución, pero, desafortunadamente, nunca estarán al mismo nivel que usar el dinero del que ya se pueda disponer previamente.