Benjamin Netanyahu dice que la acusación es un “intento de golpe” contra él y que los investigadores “no buscaban la verdad”.
El desafiante Benjamin Netanyahu rechazó el jueves todas las acusaciones de fraude y dijo que no renunciaría como primer ministro de Israel a pesar de ser acusado de una serie de cargos de corrupción. Netanyahu denunció lo que llamó las acusaciones “falsas” y “motivadas políticamente”, horas después de ser acusado por el fiscal general de soborno, fraude y abuso de confianza. Negó todas las acusaciones. “Lo que está sucediendo aquí es un intento de dar un golpe de estado contra el primer ministro”, dijo Netanyahu. “El objeto de las investigaciones fue expulsar a la derecha del gobierno”.
El Procurador General Avichai Mandelblit anunció la acusación el jueves temprano, calificándola de “decisión despiadada” basada solo en pruebas legales sólidas. Pero Netanyahu dijo que los investigadores “no estaban detrás de la verdad, sino detrás de mí”. En un discurso de 15 minutos, Netanyahu criticó a sus rivales políticos e instituciones estatales, acusando a la policía y al poder judicial de parcialidad. El veterano político argumentó que era hora de una “investigación de los investigadores” y prometió continuar en su posición a pesar de las posibles fechas en los tribunales y la intensa presión política. “Seguiré liderando este país, de acuerdo con la letra de la ley”, dijo. “No permitiré que las mentiras ganen”.
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Caos político
Los cargos generan más incertidumbre sobre quién liderará finalmente un país sumido en el caos político después de dos elecciones no concluyentes este año. La ley israelí no exige que Netanyahu renuncie al cargo de primer ministro si es acusado. Todo el proceso de una acusación y juicio podría tomar dos años. Como primer ministro, solo se vería obligado a renunciar al cargo si finalmente es declarado culpable, donde podría enfrentar hasta 10 años de prisión y / o una multa solo por cargos de soborno, mientras que el fraude y el abuso de confianza conllevan una pena de prisión. de hasta tres años.
Hugh Lovatt, analista israelí-palestino en el Consejo Europeo de Relaciones Exteriores, dijo que la acusación aún podría no ser “el final de la historia”. “Israel ahora tendrá que prepararse para una montaña rusa política en los próximos meses. Ahora más que nunca Netanyahu luchará por su vida política y personal”, dijo Lovatt.
¿Cuáles son los cargos?
En febrero, Mandelblit anunció su intención de acusar a Netanyahu de fraude, abuso de confianza y soborno, siguiendo las recomendaciones de la policía. Las acusaciones contra Netanyahu van desde recibir obsequios por valor de miles de dólares hasta un acuerdo para cambiar los marcos regulatorios a favor de un grupo de medios a cambio de una cobertura de prensa favorable. El caso 1,000 alega que Netanyahu y su esposa recibieron injustamente regalos de Arnon Milchan, un productor de Hollywood y ciudadano israelí, así como del multimillonario australiano James Packer, a cambio de favores políticos.
Los regalos incluyen champán y cigarros, según los informes. En el caso 2.000, se sospecha que Netanyahu llegó a un acuerdo con el propietario del diario israelí Yedioth Ahronoth para recibir una cobertura mediática favorable a cambio de una legislación que desaceleraría el crecimiento del periódico rival Israel Hayom. De las investigaciones contra Netanyahu, el caso 4.000 se considera el más grave. Se alega que negoció con Shaul Elovitch, el accionista controlador del gigante israelí de telecomunicaciones Bezeq, para obtener una cobertura positiva de su Walla. sitio de noticias a cambio de políticas que beneficien a Bezeq.