La canciller alemana, Angela Merkel, sufrió un episodio de espasmos y convulsiones mientras escuchaba los himnos de ambos países junto al nuevo presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, en Berlín. Merkel explicó después a los medios en la rueda de prensa conjunta: “Luego he bebido al menos tres vasos de agua, que claramente necesitaba, y me encuentro muy bien”.
El presidente de Ucrania bromeó diciendo que “ella estaba de pie a mi lado, estaba totalmente segura” durante la ceremonia. La canciller, que cumplirá 65 años el mes próximo, ya vivió un episodio incómodo en diciembre de 2014. Había sufrido una disminución de la tensión durante una entrevista en el canal alemán ZDF, ante un congreso de su partido, la CDU. La grabación se interrumpió brevemente antes de continuar.
Su portavoz, Steffen Seibert, explicó que la Canciller “no se sintió bien por un momento, luego comió y bebió algo y continuó la entrevista”. A la cabeza de una frágil coalición, Merkel, quien ha estado en el poder desde 2005, dejará la política al final de su mandato, a más tardar en 2021.