Miles de ciudadanos se reunieron en París y otras grandes ciudades francesas para mostrar su rechazo a los actos antisemitas después de un aumento de los incidentes.
Las marchas se produjeron después de que alrededor de 80 tumbas fuesen profanadas con esvásticas durante la noche en un cementerio judío en el este de Francia, según funcionarios locales. Las fotos mostraban lápidas pintadas en aerosol con símbolos nazis azules y amarillos y otros grafitis. Las tumbas fueron destrozadas con esvásticas en un cementerio judío en la aldea francesa de Quatzenheim.
El presidente francés, Emmanuel Macron, condenó el ataque durante su visita el martes al cementerio de Quatzenheim, donde inspeccionó los daños. “Tomaremos medidas, usaremos las leyes y castigaremos”, dijo Macron a los líderes de las comunidades locales en el cementerio. “Los que hicieron esto no son dignos de la república … Francia los castigará. No quiero que lo que sucedió aquí dé ideas a otros”.
Macron más tarde visitó el Memorial del Holocausto de París el martes por la noche. El ataque se produce después de que los manifestantes antigubernamentales de los gilets jaunes o “chalecos amarillos” lanzaron abusos verbales el sábado al filósofo y partidario de Israel Alain Finkielkraut cuando se topó con los manifestantes el 14to fin de semana consecutivo de sus marchas.
También fue el segundo ataque reciente en un cementerio judío en Francia. Las tumbas y un memorial del holocausto en las afueras de Estrasburgo fueron destrozados en diciembre.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, dijo que estaba sorprendido por el vandalismo en Quatzenheim y pidió a los líderes de Francia y Europa que “tomen una posición firme contra el antisemitismo”.
“Es una plaga que pone en peligro a todos, no solo a nosotros, y debe ser condenada donde quiera y cuando quiera que asuste”, dijo Netanyahu.
Lo incidentes antisemitas van en aumento
El país, que alberga a los 500.000 judíos, la comunidad más grande de Europa , ha visto un aumento del 74% en actos antisemitas, según las autoridades francesas, con 311 incidentes registrados en 2017, en comparación con 541 en 2018.
Al menos 11 personas han sido asesinadas en violencia antisemita en Francia desde 2016. En marzo pasado, Mireille Knoll, sobreviviente del Holocausto de 85 años, fue asesinada en su apartamento de París, un acto de brutalidad que obligó a miles a protestar en la capital.
En 2017, Sarah Halimi, de 65 años, también fue asesinada en su apartamento en la ciudad y arrojada desde su balcón en lo que se llamó un ataque antisemita.
En 2015, cuatro personas murieron y otras 15 fueron secuestradas en un supermercado kosher en París en un sitio llevado a cabo por un socio de los tiradores de Charlie Hebdo. Tres años antes, tres niños y una maestra fueron asesinados en una escuela judía en Toulouse.