La emisora estadounidense Univisión afirma que su equipo fue retenido en el palacio presidencial de Miraflores donde habían estado entrevistando al presidente Nicolás Maduro. El incidente ocurrió luego de que el galardonado periodista Jorge Ramos mostró a Maduro imágenes de venezolanos comiendo de un camión de basura, dice la cadena.
El ministro de Información de Venezuela, Jorge Rodríguez, dijo que el gobierno había dado la bienvenida a cientos de periodistas, pero que no apoyaba los “espectáculos baratos”. Univisión, la televisión líder en español en los Estados Unidos, dijo que el equipo de seis miembros había salido en libertad después de casi tres horas, pero que sus grabaciones y pertenencias personales no habían sido devueltas.
En la entrevista concedida a Univisión, Ramos dijo que a Maduro “no le gustaron” algunas de las preguntas sobre “la falta de democracia en Venezuela, la tortura, los presos políticos y la crisis humanitaria”.
“Se levantó después de que le mostré vídeos de jóvenes comiendo un camión de basura”, dijo sobre la entrevista en el palacio de Miraflores en la capital, Caracas. “Lo que le dije a Nicolás Maduro es que millones de venezolanos y muchos gobiernos de todo el mundo no lo consideran un presidente legítimo sino un dictador”.
Durante su detención, Ramos y la vicepresidenta de Univision, María Martínez, permanecieron “durante unos minutos” en una habitación separada donde se apagaron las luces, dijo la cadena. El equipo de Univisión será deportado el martes, según informa la agencia de noticias Reuters.
Ramos, un reputado periodista estadounidense nacido en México, es conocido por su estilo de confrontación periodistica. En 2015, fue expulsado de una conferencia de prensa del entonces candidato presidencial Donald Trump. Natalie Southwick, coordinadora del programa Centro América y Sudamérica del Comité para la Protección de Periodistas, dijo: “Al cerrar una entrevista y censurar a uno de los reporteros más destacados de América Latina, Nicolás Maduro ha demostrado su falta de respeto fundamental por la prensa”.
El mes pasado, varios periodistas locales y extranjeros fueron detenidos brevemente mientras trabajaban en Caracas. Algunos terminaron siendo deportados. En Twitter, Rodríguez agregó: “Cientos de periodistas han llegado a través de Miraflores, quienes han recibido un trato decente que siempre les damos a quienes hacen trabajo periodístico”.
Anteriormente, un grupo de países latinoamericanos y Canadá dijeron que Maduro era una amenaza para la paz y la seguridad en la región y pidió su salida inmediata, una transición democrática y elecciones libres. Reunidos en la capital colombiana de Bogotá, el grupo de Lima instó a la Corte Penal Internacional a considerar si Venezuela era culpable de crímenes de lesa humanidad por negarse a permitir la ayuda al país.
Al menos dos personas murieron en los enfrentamientos del sábado entre civiles y tropas leales a Maduro que bloquearon la entrada de ayuda extranjera organizada por el líder opositor y el autoproclamado presidente interino Juan Guaidó. Maduro dice que los esfuerzos de ayuda son parte de un golpe de estado orquestado por Estados Unidos.