La Junta Electoral Central (JEC) activó las medidas oportunas este jueves para que Quim Torra retire los lazos amarillos u otros símbolos políticos de los edificios públicos de la Generalitat. La JEC trasladó el caso a la Fiscalía, por si el Torra hubiera incurrido en un delito de desobediencia que podría inhabilitarle para cargo público. También ha abierto un expediente por infracción electoral con una sanción de hasta 3.000 euros.
La última medida ha sido a la ‘conselleria’ de Interior, que tiene de plazo hasta a las 15.00 horas del viernes para que ordene a los Mossos d’Esquadra la retirada de lazos amarillos o blancos, pancartas y otros símbolos. Esto sucede después del incumplimiento de los dos plazos de 48 horas y 24 horas.
Torra quiso ganar tiempo solicitando al Síndic de Greuges, Rafael Ribó, un informe sobre esta situación. Tras la recomendación de Ribó, el miércoles, de que los retirara, Torra anunció que lo haría. Sin embargo, el jueves siguió con su desafío a la Junta Electoral Central tapando el lazo amarillo de la fachada del Palau de la Generalitat con otra pancarta que dice “Libertad presos políticos” con un lazo de color blanco con una franja roja.
Varias ‘conselleries’ siguieron la misma estrategia. Después, el president envió a la JEC un escrito de alegaciones en el que reclama cerrar el procedimiento administrativo al no haber ni lazos amarillos ni esteladas en los edificios públicos de la Generalitat.