Con un promedio de 800 víctimas de Covid-19 por día, el país, ahora casi completamente desconfigurado, tiene más de 113,700 víctimas.
Con un promedio de alrededor de 800 víctimas diarias de Covid-19, los expertos en salud se niegan a considerar que la “primera ola” de la pandemia ha sido controlada en los Estados Unidos. ” El virus no ha cambiado, no está detrás de nosotros y no estamos en una situación normal “, insistió, jueves 11 de junio, Tom Ingelsby, director del centro de seguridad sanitaria de la escuela de salud. Johns-Hopkins Bloomberg, a la prensa. En el apogeo de la crisis, en abril y mayo, el país registró 2.000 muertes por día.
Esta advertencia se hace eco de las preocupaciones de la comunidad científica con respecto a un brote de la enfermedad en ciertos estados desde el final de la desconfinación. También interviene cuando la comunicación del gobierno sobre la pandemia se ha detenido durante varias semanas y que el presidente estadounidense, Donald Trump, anunció el miércoles la reanudación de sus reuniones de campaña, después de tres meses de interrupción, el 19 de junio en Oklahoma . Sin embargo, en el momento de la inscripción se especifica que los participantes deben ” asumir todos los riesgos asociados con Covid-19 ” y no responsabilizar al equipo de campaña en caso de contaminación.
2 millones de contagiados
La enfermedad hasta ahora ha matado a casi 114,000 personas en los Estados Unidos, una cifra probablemente menor que la realidad. No todos los estados informan datos de la misma manera y la mitad de ellos no cuentan las muertes ” probables ” debido al virus, una opción que contradice las recomendaciones de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) ) Estados Unidos también superó esta semana la marca de dos millones de casos de contaminación y, cada día, 20,000 personas adicionales se ven afectadas.
Si muestra un aumento en el número de pruebas de detección, esta cifra también indica una circulación activa del virus, según los expertos. “Parece que el país ha renunciado y aceptado la idea de que la enfermedad ahora es parte de la vida cotidiana”, Jeffrey Shaman, profesor de la Escuela de Salud Pública de la Universidad de Columbia, se lamentó en la estación de radio NPR.
La situación es muy diferente de una región a otra, pero unos veinte de 50 estados han experimentado un fuerte aumento en el número de casos y hospitalizaciones en los últimos días. En varios estados del sur donde la contención se retrasó y se realizó el desconfinamiento sin tener siempre en cuenta la situación de la salud, la tendencia preocupa a los expertos en salud pública. Arkansas, Utah, Arizona y Texas han registrado al menos un 35% de aumento en las hospitalizaciones desde el último fin de semana de mayo, lo que marcó la reapertura de muchos negocios y actividades de ocio.