Las fosas sépticas y los pozos negros son sistemas de tratamiento de aguas residuales que se usan en zonas rurales o que no cuentan con un sistema moderno de tratamiento municipal. Se trata de espacios donde se vierten las aguas provenientes de los sumideros y también de los servicios sanitarios.
En cualquiera de los dos sistemas, es necesario hacer un mantenimiento que es especializado. No se puede encargar a cualquiera, ya que se trata de manejar desechos que pueden ser contaminantes y se requiere un manejo profesional de ellos.
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¿A quién se debe contratar?
Para hacer la limpieza y mantenimiento de un pozo negro se debe contratar una organización como la empresa de fontanería en Tenerife, que tenga unas características específicas para realizar un trabajo de calidad y con total seguridad para todos, veamos:
- Equipo. Se necesita que la empresa tenga los equipos adecuados para realizar la labor. La limpieza de estos pozos implica el uso de maquinaria que puede ser manual o automática, además el equipo de seguridad de los trabajadores que incluye guantes, máscaras, ropa gruesa, botas y lentes.
- Profesionales cualificados. Los encargados de hacer la tarea de limpieza de un pozo negro deben estar entrenado para ello, los fontaneros deben conocer los protocolos de seguridad y buen manejo de los procedimientos de manera de realizar la labor lo antes posible.
- Supervisión adecuada. Es importante que los trabajadores reciban supervisión y coordinación de las tareas, la logística es muy importante en estos servicios para que sea un trabajo eficiente.
- Asesoría. Las empresas encargadas de estas limpiezas deben tener experiencia suficiente para realizarlos con excelencia y además poder asesorar a los clientes en las mejores prácticas con el pozo.
Las fosas sépticas
La fosa séptica es un sistema un poco más moderno que el pozo negro, pero también está pensado para las viviendas que estén alejadas de los centros urbanos, donde no haya sistemas de alcantarillado. La limpieza y mantenimiento de fosas sépticas se debe hacer periódicamente para que la fosa no represente peligro de contaminación. El procedimiento es el siguiente:
- El fontanero abre la tapa del tanque, para esto debe estar usando su equipo completo de seguridad. Los gases que salen son tóxicos, así que hay que hacer esto muy lentamente.
- Posteriormente, se introduce el equipo que va a aspirar el líquido superficial, para eso se va desde las capas superiores y es importante que no se retire todo el líquido.
- Por medio de agua a presión se limpian los filtros, aprovechando que han quedado al descubierto. Esto es muy importante para el adecuado funcionamiento de la fosa.
- Se le añaden los líquidos depuradores en la cantidad adecuada, de acuerdo al tamaño de la fosa.
- Luego se cierra el tanque, es muy importante que la tapa quede bien cerrada, las fosas abiertas constituyen un peligro para la seguridad de las personas.
- Se debe programar la supervisión periódica de la fosa, para que se compruebe su correcto funcionamiento y que no ofrezca peligro de contaminación.
Cuidados de la fosa séptica
Lo principal es contratar una empresa profesional que le haga el mantenimiento adecuado. Además, hay muchos cuidados que se pueden observar por parte de los habitantes de la casa:
- Usar papel de baño de calidad, es importante comprobar que el papel higiénico se deshaga totalmente en el agua, si eso no es posible, entonces no se debe echar los papeles al váter.
- Cuidar al extremo todo lo que cae en el sumidero. Los productos químicos, pinturas o elementos corrosivos pueden dañar la fosa séptica.
- Nunca echar al váter toallitas húmedas, compresas o pedazos de pañales, estos materiales no se descomponen fácilmente, forman sólidos que obstruyen la fosa, no permitiendo la descomposición correcta del material biológico.
- Limitar la grasa que cae en el sumidero, los elementos grasos se solidifican, se mezclan con otros residuos, tapan la fosa y se puede requerir un mantenimiento más agresivo y costoso. Hay que hacer el hábito de separar los aceites y elementos grasos para depositarlos apropiadamente en el basurero.