Cada vez son más las personas que recurren a las lentes de contacto para disfrutar de una buena visión y ganar en comodidad. Aunque las gafas son el método más fácil para resolver los problemas de vista, es cierto que estas pueden resultar incómodas, tienden a caerse del rostro y se ensucian con demasiada facilidad. Todos estos problemas se resuelven con el uso de las lentes de contacto, que al ir colocadas directamente en el interior del ojo no tienden a mancharse, no pueden caerse de la cara y además mantienen una visión mucho más estable con el paso de las horas. Algo que además aporta un interesante cambio en la imagen de aquellas personas a las que no les gusta llevar gafas, aunque las necesiten.
Sin embargo, el coste de usar lentes de contacto a veces puede resultar excesivo para ciertas personas, sobre todo en unos tiempos como los actuales. Esto lleva a muchos usuarios a buscar lentes de contacto baratos, lo que a veces puede suponer un riesgo para la salud cuando nos cruzamos con productos de mala calidad. Es cierto que muchos fabricantes tienden a ofrecer sus productos a costes algo más elevados de lo que deberían, pero también es verdad que muchas de las lentes que encontramos en el mercado de bajo precio a veces no tienen toda la calidad que deberían tener, pudiendo incluso provocar problemas en nuestra salud visual.
Para que esto no te suceda y puedas ahorrar dinero sin renunciar a un producto de calidad, te
ofrecemos algunas soluciones muy interesantes para comprar lentes de contacto baratas y seguras.
Contenido
La graduación
Lo primero que debemos tener en cuenta a la hora de buscar lentes de contacto es la graduación que necesitamos. A medida que esta sea más compleja es más probable que el precio de los lentes sea más elevado, sobre todo en aquellos casos en los que se produzca una combinación particular entre los diferentes parámetros de miopía y astigmatismo.
Algunas personas tienden a comprar productos con graduaciones diferentes a las que realmente necesitan para acceder a opciones más económicas, pero esto es un error, similar al que cometemos si nos compramos unos zapatos de una talla más o una talla menos de la que usamos normalmente porque son más baratos. Lo que sí debemos hacer es utilizar esa graduación como referencia a la hora de buscar productos adecuados para nuestras necesidades, respetando siempre la misma.
La marca
Otra de las cuestiones en las que muchas personas se fijan a la hora de comprar lentes de contacto es la marca. Esto es algo razonable, puesto que hablamos de unos productos que vamos a emplear a diario y que van a estar en nuestros ojos, así que escoger marcas de confianza y de buena calidad es fundamental para asegurar nuestra salud visual. Sin embargo, conviene saber que muchos fabricantes no tan conocidos son los mismos que fabrican las lentes de contacto de las marcas de primera línea y ofrecen productos de una calidad muy similar.
Pensemos que el hecho de que un producto no lleve la marca original sino la propia del fabricante puede suponer un ahorro importante en el coste de las lentillas, sin que esto afecte a la seguridad o la capacidad correctora del producto. No siempre es fácil encontrar cuáles son esas equivalencias, pero si puedes investigar un poco al respecto, seguramente encuentres unas lentes de contacto más económicas y con la misma calidad que las de primera línea.
La cantidad
Una de las formas más sencillas que tenemos para ahorrar en la compra de lentes de contacto es el tamaño del envase. Este consejo sirve tanto para las lentillas mensuales como para las diarias, aunque en general, resulta más práctico si tenemos que comprar las segundas.
La idea es que las lentillas van a ser más económicas a medida que las compremos en más cantidad. Así que si compramos lentillas diarias en un lote que sea suficiente para tres meses seguramente esa compra resulta más económica que si compramos un lote para un mes. Es cierto que la inversión inicial nos va a resultar más cara, pero a largo plazo vamos a acabar gastando menos en esas lentillas.
Dónde compras las lentillas
Tradicionalmente, las lentillas se han comprado en nuestro establecimiento de óptica habitual. Sin embargo, el auge de la venta de productos de oftalmología en Internet nos ofrece una buena alternativa para que compremos esas lentillas a precios más económicos y con la misma comodidad que tendríamos si lo hiciéramos en nuestro establecimiento de siempre. Basta con echar un vistazo a algunas de las páginas en las que se venden este tipo de productos para comprobar cómo de grande es la oferta que estas empresas ponen a nuestro alcance y cómo sus precios generalmente suelen ser muy competitivos.
Eso sí, a la hora de realizar esa compra hay que tener en cuenta un par de detalles. El primero es comprar únicamente en establecimientos que sean conocidos por su calidad y que ofrezcan todas las garantías necesarias de cara al producto que ofrecen. Algunas tiendas ofrecen precios excesivamente económicos y estos pueden ser señal de que el producto no es de calidad deseada o procede de un fabricante de segunda línea. El segundo aspecto que debemos valorar son los gastos de envío de la operación. De nada nos sirve comprar lentillas económicas si luego tenemos que pagar un importe elevado por dicho transporte.
Consejos finales
Como últimos consejos para ahorrar en tus compras de lentillas te dejamos estos dos: el primero es que compares los productos que tienes intención de comprar, especialmente si estos son de la misma marca, tanto en diferentes establecimientos de óptica como dentro de las páginas de Internet que acabamos de mencionar. Esto te ayudará a encontrar el mejor precio dado que, a fin de cuentas, estamos hablando del mismo producto.
Por otro lado, también conviene que busques los lotes que muchas veces algunas empresas ofrecen a los usuarios, especialmente a través de la red. Muchos de los lotes incluyen tanto las lentillas como el líquido imprescindible para mantenerlas adecuadamente, y comprar todo en conjunto siempre será más económico que hacerlo por separado.