Una de las frustraciones más comunes a la hora de medir los resultados de una campaña de email marketing es darse cuenta de que los contactos no están recibiendo el mensaje y los correos están terminando depositados en la carpeta de Spam. Increíblemente, este error se debe a una optimización inadecuada de nuestra lista de contactos.
Al menos un 20% de los correos comerciales que son enviados, no llegan a la bandeja de entrada del destinatario. El parámetro que mide esta cifra se denomina “capacidad de entrega” y en las siguientes líneas nos encargaremos de definir el concepto y hablar sobre algunas estrategias de optimización que se pueden aplicar a las campañas de email marketing.
Contenido
¿Qué es la entregabilidad o capacidad de entrega?
Dentro del email marketing, la capacidad de entrega es una estadística de rendimiento fundamental, ya que nos permite conocer si el contenido que se está enviando resulta adecuado para el público objetivo y que los mensajes enviados sean abiertos efectivamente, en lugar de ser enviados a la carpeta de Spam por parte del usuario o del proveedor de servicios.
Importancia de la entregabilidad
La capacidad de entrega es un factor trascendental para el éxito de una campaña de mailing. Cuando una campaña de mensajes enviados tiene una capacidad de entrega deficiente, los resultados de toda la estrategia serán pobres, muy inferiores a los esperados. Afectará al ROI e, incluso, puede tener efectos negativos sobre la reputación de la marca en el largo plazo.
¿Cómo podemos optimizar la capacidad de entrega de nuestra campaña de email marketing?
Existe una serie de pasos necesarios para asegurar que la entregabilidad se incremente y los mensajes de las campañas dejen de ser considerados como Spam. Lo primero que se debe realizar es una depuración de la lista de correos, lo cual podemos lograr utilizando el verificador de email Captain Verify, el cual se encuentra disponible de forma gratuita.
Su función es verificar y validar nuestras listas de correo, proporcionando un informe estadístico detallado sobre la calidad de la base de datos en cuestión, dando a conocer la cantidad exacta de correos electrónicos válidos, inválidos, desconocidos, direcciones mal escritas, rebotes, Honeypots y otras de las trampas de Spam más comunes, que afectan a la entregabilidad de una campaña.
Cuidar la calidad del contenido
El siguiente paso será verificar la calidad del contenido enviado. El contenido es fundamental para que la capacidad de entrega se mantenga en estado óptimo. En este sentido, es importante evitar el uso de caracteres especiales, cuidar el vocabulario que se utiliza y limitar a cero el uso de palabras como “gratis” o “barato”, que suelen causar la clasificación inmediata de Spam.
Igualmente, es buena idea restringir el envío de correos compuestos por una sola imagen de grandes dimensiones, puesto que esta clase de mensajes no tiene una buena acogida entre los lectores. Junto a esto, se completa la estrategia enviando mensajes únicamente a usuarios que hayan entregado su consentimiento de forma expresa, suscribiéndose a un Newsletter.