Boris Johnson se comprometió el domingo a introducir sentencias mínimas y abolir las liberaciones anticipadas para los condenados por terrorismo. Medidas que le valieron ser acusado de usar con fines políticos un ataque asesino en Londres cometido por uno de ellos , diez días de legislativo.
Dos días después del ataque con cuchillo que mató a dos personas en el Puente de Londres el viernes, el primer ministro británico acusó a los laboristas, ahora en oposición, de estar detrás de una ley que permitía liberación automática anticipada del asaltante. Usman Khan, de 28 años, fue liberado de prisión en 2018, seis años después de su condena por delitos terroristas.
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Una purga de sentencia hasta el final
“Este sistema debe terminar”, declaró el líder conservador en un foro publicado por el Mail el domingo , en medio de la campaña para su reelección en las elecciones anticipadas del 12 de diciembre. “Si es condenado por un delito grave de terrorismo, debe haber una sentencia mínima obligatoria de 14 años, y algunos nunca deben salir”, dijo.
“Para todos los delitos terroristas y extremistas, la sentencia pronunciada por el juez debe cumplirse efectivamente: estos criminales deben cumplir cada día de su sentencia, sin excepción”. Tales medidas habrían evitado el sangriento ataque reclamado por el grupo yihadista del Estado Islámico , aseguró el Primer Ministro.
74 otros casos similares
Usman Khan fue sentenciado a una pena de prisión indefinida en 2012, con un mínimo de ocho años, reducido a 16 años de prisión en apelación en 2013, por pertenecer a un grupo que había querido cometer ataques terroristas. La bomba en el Reino Unido.
En la BBC, Boris Johnson dijo que los casos de “unos 74” otros condenados por terrorismo que también recibieron libertad anticipada serían examinados “para asegurarse de que no representan una amenaza”.
Una reacción demasiado rápida a los ojos de la oposición.
Pero inmediatamente recibió críticas de aquellos que piensan que quiere usar el drama al adelantar estas propuestas que no están incluidas en el programa de conservadores presentado a fines de noviembre.
“No necesitamos reacciones de cortadores de galletas”, tuiteó David Merritt, señalando “la destrucción del servicio de libertad condicional que se supone que controla a los prisioneros después de que sean liberados”. Desde 2010, cuando los conservadores llegaron al poder, este servicio se ha reducido drásticamente y “por lo tanto, estamos menos seguros”, agregó.
Comentarios mal percibidos
“En medio de una elección, no debemos capitalizar políticamente una tragedia, y eso es lo que hace”, dijo el Líder Adjunto de los Demócratas Liberales, Ed Davey, en Sky News. Para el líder del Partido Laborista, Jeremy Corbyn, “no necesariamente” encarcela a los presos condenados por terrorismo arrojando la llave: “Depende de las circunstancias”.
“Ningún gobierno puede evitar todos los ataques”, pero “el gobierno puede tomar medidas para hacer que tales actos terroristas sean menos probables”, argumentó más tarde en un discurso de campaña en York: la atención debería centrarse en policía, libertad condicional y servicios sociales.